Tras el extraordinario éxito obtenido con el El libro de mi destino, donde dio voz a las mujeres iraníes oprimidas por el fanatismo religioso, Parinoush Saniee aborda en su segunda novela las aciagas secuelas de la insensibilidad y la ignorancia. Basándose en el caso real de un niño que no habló hasta cumplir los siete años, Saniee toma el pulso a la sociedad de su país con una historia en la que el silencio cobra la fuerza de un grito de protesta.