Cuando queda varada en México junto a Martín, un compañero de trabajo al que casi no conoce, Roberta
descubre tres cosas:
1. Que las cenizas de un volcán pueden tener repercusiones definitivas e inesperadas en otra punta del
mundo.
2. Que compartir cuarto de hotel con un desconocido al principio puede ser incómodo, después no tanto, y al final tremendamente incómodo.
3. Que no conviene esperar el momento perfecto para decir las cosas.
Y así, un día los aeropuertos vuelven a funcionar, el resto de la gente cambia de trabajo, hace despedidas de solteros, se casa, se muda, tiene hijos… Mientras Roberta acepta citas a ciegas y Martín trata de ajustarse al plan
de su nueva novia, los dos se juntan en su lugar preferido para hablar sobre casi todo: música, el matrimonio, sus trabajos, fútbol. La vida continúa, pero algo que surgió en ese hotel de México los mantiene en suspenso. Expertos en casi todo, principiantes en el amor, deberán encontrar la forma de desbloquear lo que no se dijo para pasar al siguiente nivel. En Principiantes absolutos, María José Molteno conjuga humor, personajes inolvidables y destreza narrativa en una comedia romántica muy actual, que evoca la mejor tradición del género.
Opiniones del libro