Gerardo y Saúl son hijos de un médico prestigioso, pero sienten que su padre no los entiende y tienen problemas para comunicarse con él. Por otro lado, su mamá es una mujer amorosa, incapaz de poner normas de disciplina en casa.
La historia de la familia Hernández es parecida a la de muchas, donde existen autoritarismo y distanciamiento de los padres, rebeldía y falta de respeto de los hijos, hostilidad y burlas entre hermanos, discusiones hirientes y prolongados periodos de indiferencia.
Pero su drama se complica en una vorágine de sucesos que los lleva a situaciones extremas de las que ninguna familia está exenta.