Lo último que la pareja formada por los doctores Laurie Montgomery y Jack Stapleton necesitan en su ya de por sí complicada vida es un crimen. Pero la muerte inesperada de una de las mejores amigas de Laurie es demasiado sospechosa para no investigarla hasta el fondo.
La doctora Sue Passero muere en el estacionamiento del Manhattan Memorial Hospital cuando acaba de terminar su turno. Jack es el responsable de realizar la correspondiente autopsia, y tras un examen preliminar considera que el ataque cardíaco, que se presentó como la posible causa de la muerte en primer lugar, es una explicación poco consistente, por lo que decide posponer sus conclusiones e investigar las circunstancias, aunque eso signifique desafiar las normas. Lo que comenzó siendo una investigación sobre el trágico fallecimiento de Sue se convierte pronto en un juego mortal y peligroso entre Jack y un asesino inteligente y trastornado, dispuesto a actuar en cualquier momento.
Robin Cook arrastra a sus lectores a la zona más oscura y peligrosa de un hospital.