A Cassie siempre se le dio bien entender a la gente. Observándolos puede saber quiénes son y lo que quieren, pero este don nunca ha sido algo que se haya tomado muy en serio. O, al menos, hasta que el FBI toca su puerta y la recluta para un programa secreto. En él, Cassie y otros jóvenes excepcionales deben solucionar famosos casos sin resolver. Pero nadie en el programa es quien dice ser y, cuando aparece un nuevo asesino, el peligro estará más cerca que nunca. Atrapada en una caza inesperada, Cassie tendrá que enfrentarse a sus mayores miedos para sobrevivir.