Las horas, los días y las semanas pasan volando y, sin apenas darnos cuenta, las obligaciones y las urgencias pasan por delante de todas aquellas cosas que nos hacen disfrutar de la vida. Si sientes que la rutina te agobia, aprende a buscar y a disfrutar de momentos de calma. Centrate en el “ahora” y emplea tiempo en esa actividad que te resulta tan gratificante. Haz que cada día cuente, apórtale un significado, ¡no te arrepentirás!