Nuevo caso de los Irregulares, la pandilla de chicos callejeros que trabajaba para Sherlock Holmes, basado en "El problema final", una historia corta en la que Sir Arthur "mata" a su protagonista, el afamado detective. La novela tiene el acierto de introducir en la narración original a los Irregulares, de reescribirla desde el punto de vista de los chicos. Y no sólo eso, otra novedad de interés es que en esta ocasión no trabajan para Sherlock Holmes, sino a pesar de él: la vida del detective corre peligro y lo único que este quiere es alejarse de ellos para protegerlos. Como es natural, en los chicos pesa más el afecto y la lealtad que sienten por su mentor que el miedo.