Al monstruo Serapio se le afloja el primero de sus cuarenta dientes de leche. Su familia gruñe de lo contenta que está. Pero también se entusiasman los Ratones Pérez de todo el mundo; las Hadas de los Dientes y los Duendes del Kilimanjaro. ¡Un diente de leche de monstruo es muy valioso! ¿Quién será tan valiente que consiga el título de atrapadientes? La historia de una aterradora sonrisa con ventanita.