Nuestras RETINAS con forma de PANTALLA... SATURADAS. Nuestra capacidad de sorpresa visual, aniquilada... Mirar hasta la saciedad y no ver... más allá de lo superfluo y la repetición estética de turno, Sesenta y dos mil cuatrocientas repeticiones crean una verdad, decía Huxley en Un mundo feliz.
Hasta que la casualidad pone ante tus ojos una IMAGEN con voz única y universo propio, un grito de sinestesia artística donde el color y la forma son como un dulce bisturí que atraviesa la vida, le arranca sus ancas de nada y muestra su sentido solo cuando está abierta en canal.
Una celebración, una FIESTA de y para los 5 sentidos bajo la apariencia de un libro, pero que en realidad es un artefacto poético que da sentido a esos 5 sentidos. Tacto. Vista. Olfato. Gusto. Oído. Son también las PALABRAS y los pinceles en los que se mezclan la valentía y el amor, el sexo, la rutina y la soledad, el desamor y la sorpresa, la decepción, heridas y cicatrices, mundos donde la celebración de la VIDA, enmascarada bajo gotas de lluvia, es su mejor bálsamo.