Adscrito a la llamada Generación del 27, el poeta, prosista y dramaturgo español Federico García Lorca está considerado unánimemente como el poeta de mayor influencia y renombre de toda la literatura hispana del siglo XX y uno de los principales baluartes del teatro español de su época.
La obra poética de Lorca es el claro reflejo de un sentimiento trágico de la vida, en ella conviven la tradición popular y la culta y se alimenta, como toda su obra, de obsesiones el amor, el deseo
, utilizando frecuentemente símbolos: la luna, el caballo, el toro, el agua, la sangre
, concediendo a la metáfora un importante protagonismo.
En plena crisis artística y vital, el poeta decide viajar a Nueva York en 1929, donde reside todo un año. A su regreso, y en una breve parada en la isla de Cuba, escribe una serie de excelentes poemas que para muchos constituyen la cima más alta de toda su creación literaria.