Nuestras vidas de pensamiento tienen un poder increíble sobre nuestro bienestar mental, emocional e incluso físico. De hecho, nuestros pensamientos pueden limitarnos a lo que creemos que podemos hacer, o liberarnos para experimentar habilidades mucho más allá de nuestras expectativas. Cuando elijamos una mentalidad que amplíe nuestras habilidades en lugar de ponernos límites a nosotros mismos, experimentaremos una mayor satisfacción intelectual, control emocional y salud física. La única pregunta es ¿cómo?.