Mucho se habla de desarrollo rural pero poco se toma en cuenta a las familias campesinas como actores directos del mismo. El desafío de hoy para el país es volver a interpretar el desarrollo y el trabajo con el sector rural. Este libro trata de demostrar la importancia y los potenciales del campesinado para el país. En él se detallan las razones por las que las familias campesinas, lejos de ser un problema, son, en realidad, un fuerte potencial para el desarrollo nacional. Revisemos, por tanto, nuestros mitos sobre los campesinos. Y veamos cuál es su aporte actual y futuro a la sociedad. Planifiquemos en conjunto, con todas las personas involucradas, acciones que conduzcan a un desarrollo efectivo. Porque invertir esfuerzos y dinero sin desarrollar las capacidades latentes en las familias es, sencillamente, una lamentable pérdida de tiempo. Todo ello, por cierto, se encuentra relatado en este volumen.