Cuando hay que pensar, piensa; cuando hay que vivir, vive.
Texto salpicado de sabiduría budista, donde el autor nos propone cambiar la mente, conseguir quietud y discernimiento.
Nos muestra lasfunciones de la mente y analiza los tipos de mente, enseñándonos conceptos clave para comenzar con la práctica de la meditación que nos ayude adominar los pensamientos, a verlos como nubes que pasan, sin apropiárnoslos.
Analiza la atención y el entendimiento correcto. Es importante la clara comprensión del fin, de los medios, de la idoneidad y de las enseñanzas. Y, nos advierte de las tendencias insanas que nos autodestruyen y destruyen a los demás: apego, odio, ofuscación, celos, envidia, resentimiento e ira.
Nos propone realizar esfuerzos conscientes y seguir lassendas de a autobservación,autoconocimiento, transformación y autorrealización. Esta última, conlleva a actualizar los potenciales más hermosos del ser humano y a su total humanización.
Lameditación, además de un método para la transformación mental y emocional, es unaactitud de vida. La buena noticia es queuno no es como es, uno es como se proponga ser.