'Los pecados tradicionales -soberbia, pereza, gula, envidia, ira, avaricia y lujuria- están presentes en nuestra vida diaria, algunos devaluados y otros con ciertas transformaciones. Pero cuando los relacionamos con los tiempos que vivimos, nos encontramos con infinidad de caminos que llevan a otras tantas preguntas que hoy se hace el hombre, y que tienen que ver con el sentido mismo de la vida y la trascendencia. Se mezclan en los pecados cuestiones religiosas, históricas, económicas, sociales, artísticas y varios factores que tienen que ver con el mundo actual.
Tomando como punto de partida los pecados, incluso discrepando con el planteo religioso, se puede bucear en el destino que nos espera frente al avance tecnológico, que incluye la posibilidad de crear vida artificial, con el peligro de que nazcan seres perfectos, que para algunos estarán cerca de Dios, pero que desgraciadamente serán deshumanizados.
Además de analizar con detenimiento los pecados y sus implicancias actuales, Las siete pecados capitales me permitió intercambiar ideas con religiosos, escritores, actores, filósofos y personalidades que tienen inquietudes sobre la actualidad y el devenir de los seres humanos. También pude, casi como en broma, conversar amablemente con el propio Satanás. Defendió cada uno de los pecados e intentó convencerme de sus beneficios para la Humanidad, y para mí en particular. La intención, en definitiva, es transferirle al lector estas percepciones para que también le resulten elementos enriquecedores para su propia exploración.'