La historia argentina del siglo XX describe una curiosa curva que, recorrida de un extremo al otro, sintetiza los sueños, el apogeo y la debacle de nuestro pais. Los fastos del Centenario exhibieron al mundo la pompa desmesurada de una nacían que se soñaba rica para siempre; el peronismo en su hora de gloria se alzó ante el futuro con promesas de justicia social, independencia económica y soberanía política; y el fin del siglo disparó un pais prácticamente devastado, con escalofriantes cifras de pobreza, desocupación y marginación social.