"En uno de los debates más apasionantes y profundos de la Ilustración, Los derechos del hombre de Thomas Paine surge como réplica a las objeciones que el filósofo y político Edmund Burke pronuncia contra la Revolución francesa, a la que desacreditaba sin comprenderla pues temía que los aires revolucionarios alcanzaran Inglaterra.
Frente al argumento de Burke acerca de la imposibilidad de los ingleses de gobernarse a sí mismos, Paine declara el derecho de los hombres a la revolución ya que el hombre no tiene derecho de propiedad sobre el hombre, ni ninguna generación tiene derecho de propiedad sobre las generaciones venideras. No existen precedentes de la conmoción y la popularidad que generó el texto de Paine en su época, palpable en el tiraje cercano a un millón de copias que alcanzó su obra"