¿Quién quiere ser latinoamericano? Cada año hay más respuestas negativas: gobernantes que venden el patrimonio, empresarios que se llevan sus inversiones, y en muchos países más de diez por ciento se ha contestado la pregunta emigrando. En lugar de la retórica política que celebra la historia común, el autor encuentra que los estudios antropológicos y de economía de la cultura, los documentos literarios y artísticos ofrecen una visión ambivalente sobre la viabilidad de América latina.
Hay tres modos principales en que nos globalizamos: como productores culturales, como migrantes y como deudores. Diagnóstico y prospectiva: se trata de repensar el continente en el horizonte del Acuerdo de Libre Comercio de las Américas propuesto por los Estados Unidos para 2005 y de la creciente presencia europea, sobre todo española, en la región.
Este libro explora qué pueden hacer todavía los ciudadanos, los organismos nacionales e internacionales para reconocer la diversidad cultural y sumar recursos, convertirse en una economía de escala y reenfocar las tareas socioculturales. Los proyectos frustrados de integración continental son releídos junto a la expansión de las industrias comunicacionales, el asalto neoliberal a las sociedades y las innovaciones de los movimientos de protesta.
Este libro recibió el VIII Premio Anual de Ensayo Literario Hispanoamericano Lya Kostakowsky de la Fundación Cardoza y Aragón, en febrero de 2002, por decisión unánime del jurado, compuesto por Pablo González Casanova, Rigoberta Menchú y Luis Villoro.