Los miles de lectores que disfrutan con cada libro de Salvo Montalbo, el entrañable personaje creado por Andrea Camilleri el autor más leído de Italia, encontrará en esta ocasión una serie de relatos en los que el peculiar comisario siciliano, sabio intérprete del arte de vivir, se supera a sí mismo.
Una palabra fuera de tono, un gesto descontrolado, un detalle incongruente, detectados con una percepción más que aguda en la cadena de absurdos de la vida cotidiana, son suficientes para poner en movimiento la máquina de su investigación, en la cual Montalbano se emplea con esa mezcla de perspicacia y coraje que todos quisiéramos poseer.
Así pues, los crímenes y criminales que se someterán al infalible escrutinio de Montalbano son tan heterogéneos y extraños como esa vieja pareja de actores que interpreta un fúnebre librero en la intimidad de su dormitorio o aquel juez torturado por la idea de su estado de ánimo influya en la ecuanimidad de sus fallos.