Volvemos a encontrarnos con el superintendente Thomas Pitt y su perspicaz esposa Charlotte. Pese al éxito de su último caso, las presiones de las altas esferas (véae El complot de Witechapel) provocan otro 'destierro' de Pitt a la Sección Especial.
En todas partes reina un ambiente tenso y reivindicatvio: la cuestión de Irlanda, la reducción de la jornada laboral, la degradación del Imperio, elvoto de las mujeres... y además se avecinan elecciones. En cuanto al célebre detective comiene a investigar el asesinato de una médium muy solicitada por la alta sociedad, volverá a alzarse la amenaza de una nueva conspiración en al que puede estar implicado su enemigo, el oscuro juez Voisey.