Se trata sin duda del hombre más grande que haya conocido la Historia Universal, y por tanto, su vida debe ser estudiada basándose en toda la información disponible:
Los evangelios oficiales, los apócrifos y en cuantos documentos sea posible. Al margen de la religión y la propaganda nos encontramos ante un hombre excepcional. Todo en su vida, desde sus acciones a sus palabras y, principalmente, su final, lo ponen de manifiesto.