Un hombre está sentado en la cama. Es mi padre. Bajo las mantas yace el cuerpo de una mujer. Era mi madre. La historia no empieza realmente aquí. Tampoco termina en este punto, pero es el momento al que siempre regresa mi mente, la manera en que siempre los veo. Una mañana Rusty Sabich, sexagenario y presidente del tribunal de apelación del condado de Kindle, descubre el cadáver de su mujer Barbara junto a él en la cama que ambos comparten. Sin embargo, espera casi un día entero antes de avisar a la policía y a los servicios de emergencias. Ni siquiera avisa a su hijo Nat. ¿Por qué? Veinte años antes el mismo hombre, entonces ayudante del fiscal del condado, fue procesado por el homicidio de su colega Carolyn Polhemus, y durantela investigación se descubrió que tenían una aventura. Tommy Molto, fiscal del distrito, se convirtió desde ese instante en su más enconado enemigo. Finalmente Rusty fue absuelto, pero veinte años después, la rivalidad entre los dos hombres sigue intacta. Tras el éxito de Presunto inocente, Scott Turow regresa con Inocente, su apasionante secuela.