Es difícil por momentos desentrañar que nos cuenta Ana Martini pero sus cuentos no se pueden evadir, tienen el atractivo de lo misterioso, están vestidos como los pecados más peligrosos. Por eso, este libro es para valientes, para curiosos, para nostálgicos, para apasionados, en suma es para todos. Inaugura otra forma de narrar, esa que atrapa y que deja efectos residuales en la mente de quienes se asoman a sus páginas.
En nombre de las escritoras paraguayas nadie me autorizó pero creo que lo hubieran hecho doy la bienvenida a una nueva escritora que suma su voz a la nuestra