Liberal e hispánico no son términos que suelan ir asociados. Sin embargo, tanto en la América hispanohablante como en España el liberalismo ha sido, al menos desde 1812, un eje de pensamiento político y una asignatura pendiente que quizá haya llegado el momento de aprobar.
1812 más doscientos años nos llevan, mes arriba o abajo, al momento presente. ¿Dónde están hoy los liberales españoles? ¿Dónde los liberales peruanos, o los argentinos o los mexicanos? ¿Se oyen sus propuestas? Poco, porque se sobrepone el griterío de las consignas. De ahí que en este breve tratado sobre el liberalismo se haya optado por alzar la voz, por hablar poco pero hablar claro, y por refutar algunos lugares comunes, ciertos prejuicios y más de una tontería.
El resultado es un verdadero manual de uso del pensamiento liberal condensado y, bajo su envoltorio de panfleto político, una invitación a darle espacio a la libertad y a recuperar un concepto de ciudadanía que dignifica y vincula el espíritu político del mundo hispánico.