La revolución tecnológica abre nuevas fronteras a nuestro desarrollo como especie, pero también propicia la pérdida de libertad individual. Este libro recorre la senda de la evolución de nuestra comunicación social en los últimos cincuenta años y aborda el desarrollo de las modernas relaciones públicas, su capacidad para crear climas de opinión y su interacción con los denominados «grupos de interés». Pero, sobre todo, se instala en la inmediatez de la comunicación digital y la eclosión del «emiceptor»: el ciudadano que, a través de las redes, recibe y genera estados de opinión