Inspirándose en el sofisticado código que la sociedad victoriana utilizaba para expresar sentimientos por medio de las flores, Vanessa Diffenbaugh narra el viaje emocional de una joven californiana que, marcada por una dolorosa historia personal, encuentra en este peculiar lenguaje el medio para recuperar su capacidad de confiar y amar a sus semejantes.
A los 18 años, tras una vida entrando y saliendo de numerosos hogares de acogida y pisos tutelados, Victoria Jones está obligada por ley a emanciparse.
Se ha convertido en una joven introvertida y arisca, y solo en su pasión por las flores se vislumbra un camino de salvación. Así, tras encontrar trabajo en una floristería, se cruza con una joven a quien conoció diez años antes, durante la época en que vivió en casa de Elizabeth, una madre de acogida que le enseñó el lenguaje de las flores.