Ideólogo y fundador de la extinta Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, Vladímir Ilich Uliánov, Lenin (1870-1924), fue sin duda uno de los personajes políticos más influyentes del siglo XX.
"El Estado y la revolución", obra escrita en el verano de 1917, apenas unos meses antes de la definitiva embestida que habría de dar al traste con el imperio de los zares, representa la plasmación en el terreno de la teoría política de algunas cuestiones clave de la teoría marxista, así como la resolución de no pocas de sus lagunas, constituyendo en este sentido un instrumento clave para la instauración del poder bolchevique y la posterior propagación del modelo soviético por buena parte del globo.
Pese a que el definitivo fracaso del leninismo como modelo político y social ha despojado a esta obra de la trascendencia que en su momento tuvo, el paso del tiempo y la correspondiente atenuación de los prejuicios en torno a su autor la dotan de un renovado interés, ya que su lectura hoy en día nos permite calibrar sus repercusiones teóricas y prácticas y, en definitiva, nos da una clave insoslayable de lo que fue en buena parte el siglo XX.