La autodependencia, el amor, el dolor y la felicidad son los cuatro caminos que, según Jorge Bucay, conducen a la plenitud del ser humano, cuatro trayectos que cada uno ha de recorrer desde su experiencia personal y a su propio ritmo.
En ''El camino de la felicidad'', Bucay nos habla de la ilusión, el deseo, la acción y el desafío que hay que empeñar para descubrir quienes somos en realidad. La felicidad es fruto de una búsqueda personal, de un compromiso incondicional con la propia vida. En palabras del autor: "Ser feliz no quiere decir necesariamente estar disfrutando, sino vivir la serenidad que me da saber que estoy en el camino correcto hacia algo placentero, disfrutable, hacia algo que tiene sentido para mí". Para Jorge Bucay, como el mismo anuncia desde el principio, ser feliz no es un derecho, es una obligación.