«Muerto mientras el sol recorre el día, el conde aguarda el regreso de las sombras que lo despertarán; entonces, como un siniestro animal nocturno, perseguirá nuevas víctimas que alimenten con sangre su inmortalidad».
Una incursión por parajes inhóspitos y habitaciones cerradas, donde la vida y la muerte se devoran salvajemente.
A través de un notable trabajo de ilustración compuesto por más de 50 estampas, Luis Scafati rinde homenaje al mítico personaje y al vasto imaginario que, desde hace siglos, ha inspirado la literatura sobre vampiros.