Estos cuentos evocan dos etapas difíciles en la historia del Paraguay: la revolución del 47 y la dictadura que durante 35 años ejerció Alfredo Stroessner. Durante el 47 el país se dividió en dos bandos y su suelo fue cementerio de sus propios hijos.
Luego, la dictadura stronista convirtió al país en una inmensa cárcel. No todo lo que aquí se cuenta es real, tampoco todo es mentira, pero escritos con lenguaje sencillo posibilitan una lectura fluida y retratan épocas que nadie quiere que se repitan.