"Extrañamente nuestra dramaturgia, de todos los tiempos, no suele bucear en nuestra historia con la insistencia que pareciera demandar los demas temas. El nuestro es un país de tragedias y de dramas, tanto, que bastaría extender los brazos, arrancarlos y posarlos en la escena. Novelas hay algunas; cuentos, en mayor número. ¡Pero teatro...! Y conste que nuestro país ha padecido dos gueras internacionales, decenas de guerras civiles, dictaduras feroces, en las que el factor humano -singular o colectivo- es, debería ser, una tentación permanente para autores y actores.
Lita Pérez Cñaceres concibió un libro inquietante, "Cuentos del 47 y de la dictadura". Se refieren a la revolución de 1947, que duró cinco meses pero sus efectos se extendieron por décadas, en el supuesto de que hoy los hayamos superado. Y la dictadura, está pensada a la del general Alfredo Stroessner que ha tenido -sigue teniendo- una trágica consecuencia que Lita ha sabido contarnos, conmovernos, para hacernos reflexionar sobre ese pasado reciente.
Este libro tuvo la suerte, además, de caer en manos de dos profesionales del teatro. Y como buenas profesionales, sensibles. Estudiaron el libro de Lita del derecho y del revés en busca del ángulo exacto, del perfil seguro, para darle el lenguaje teatral -que es imagen- y devorlvernos con otra envoltura digna del original, de la vibración humana que se desprende de cada historia".