El cadáver del embajador noruego aparece asesinado en un burdel de Bangkok. El embajador mantenía relaciones muy cercanas con el Primer Ministro noruego; en Oslo para evitar el escándalo, tratan de desviar la atención hacia el Ministro de Asuntos Exteriores.
Harry Hole, alcoholizado y adicto a las vitaminas B12, es enviado a Bangkok con instrucciones claras: silenciar el caso. Sin embargo, al llegar a Bangkok, Harry descubre que el caso esconde mucho más que un asesinato corriente. Hay algo más, algo mucho más siniestro; o por decirlo de otra forma: de cada cucaracha que ve en la habitación de su hotel, sabe que detrás de las paredes hay centenares mas.