En este libro la socióloga Diana García nos presenta un estudio pormenorizado sobre la situación de la juventud a lo largo de los 30 años que nos separan de 1989. El resultado es una mezcla de resignación, esperanza, rebeldía y convicción en que la juventud está llamada a ser el actor político de la transformación democrática que necesita nuestro país. El estudio combina las experiencias de García desde la militancia en organizaciones juveniles, sus análisis académicos y su rol de gestora de políticas públicas. Como tal es un llamado agudo a la ciudadanía joven, y la ciudadanía en general interesada en comprender a este sector de la población, a participar activamente en la construcción de las políticas públicas que afectan a la juventud.