Las claves culinarias para mantener un corazón sano son muy sencillas: evite el exceso de lípidos, puesto que favorece la hipercolesterolemia; no abuse de los hidratos de carbono y evite el consumo innecesario de sal. Todas estas recomendaciones le ayudarán a mantener el peso corporal ideal, puesto que la obesidad es uno de los principales factores de riesgo cardiovascular.