Muchos compañeros de equipo de Tony Grizi ya han sido reclutados por algunas de las más prestigiosas escuelas de fútbol del país. Así es como se convertirán en jugadores profesionales. Sin embargo, ningún equipo parece querer a Tony. ¿La razón? Su corta estatura... Con el respaldo de su padre y sus amigos, el joven delantero atraviesa Francia entera en busca de un lugar donde conseguir que sus sueños se hagan realidad.