El apasionado romance de Marco Antonio y Cleopatra es una de las grandes historias de amor de todos los tiempos. Él fue el hombre más poderoso del mundo romano durante un tiempo, hasta que fue derrotado por el joven, frío y calculador Augusto, que después se proclamaría primer emperador de Roma. Ella fue la inteligente, ambiciosa y bella reina de Egipto. Juntos vivieron un lujoso esplendor, lucharon por un imperio que perdieron y acabaron quitándose la vida.
Dos mil años de imaginación romántica han sepultado una verdad aún más interesante. Antonio no era solo un soldado, y de hecho tenía poca experiencia y dotes militares; su ascenso al poder tuvo más que ver con sus aptitudes políticas y con el azar. Cleopatra no era una egipcia cualquiera, sino la última reina de una dinastía creada por uno de los generales de Alejandro Magno. Solo gracias al apoyo romano, y concretamente gracias a César y Antonio, sus amantes, pudo gobernar en una corte en la que el mayor peligro eran los rivales de su propia familia y el asesinato era algo habitual.
La historia de Antonio y Cleopatra es la del choque de dos culturas, una crónica de ambición y crueldad y también de pasión humana. Adrian Goldsworthy descubre los verdaderos hechos de esta famosa pareja, tan fascinantes como su mito.