La escasez de información específica ha conducido, durante años, a los profesionales que optan por trabajar en el área de la Nutrición Deportiva, a basar su labor fundamentalmente en el conocimiento empírico e intuitivo. No obstante, la alimentación del deportista debe ser científica, no solamente empírica. Requiere una formación específica y una actualización continua por parte de los profesionales de la nutrición con el objetivo de propiciar el análisis y favorecer la transmisión de conceptos adecuados.
De esta misma forma la población de deportistas demanda bibliografía científica adaptada a un lenguaje simple que les permita contrarrestar su exposición a información que puede ser confusa, contradictoria y en ocasiones tendenciosa. Los deportistas necesitan información en que basar las decisiones nutricionales, con el objetivo de cubrir las necesidades diarias en función de las características de sus programas de entrenamientos, el trabajo, el estudio y la vida social.
Este es un libro que reúne el material científico técnico con la forma de aplicar los contenidos en la vida cotidiana del deportista a través de ejemplos y recetas.