El Agente X es diferente a todo lo que la ciencia moderna ha presenciado hasta ahora: un virus que se propaga rápidamente y que convierte a los infectados en maníacos delirantes a la caza de los pocos supervivientes que quedan en el planeta.
Una de esas supervivientes es Lulú, una adolescente que no contrae el virus por una afección médica poco común. Inmune al Agente X y testigo de la brutal degeneración de su propia madre, Lulú huye hacia el norte, el único lugar de la Tierra que se rumorea que es seguro.