Necesitamos estar cerca de las personas que queremos casi tanto como el aire que respiramos.
Stella y Will tienen la misma enfermedad pulmonar, en el mismo hospital. Cuando se enamoran, recuperan la alegría de vivir, pero hay un problema: por el peligro de contagio, no pueden acercarse a menos de dos metros sin arriesgar sus vidas.
¿Puedes amar a alguien que no puedes tocar?